La Exposición de Motivos de la Ley 2/2015 constata una realidad de nuestra economía: la aplicación generalizada de fórmulas automáticas de actualización de precios de los contratos, bien sea con arreglo al IPC u otros índices.
El legislador valora desfavorablemente esta práctica ya que provoca efectos inflacionarios sobre el conjunto de la economía, al trasladar automáticamente el IPC u otros índices agregados a los precios de múltiples contratos, a pesar de que muchas veces no se corresponden con la variación efectiva de los costes reales de dichos contratos.